Ha estado aquí Manolo, que por error nos trajo un mueble del que no quería desprenderse y que ya habíamos puesto a la venta. Se ha empeñado en comprárnoslo pese a nuestra insistencia en que no lo hiciera: «lo que estáis haciendo merece que lo haga», nos ha dicho. Encima se ha comprometido a construirnos una herramienta para desmontar los palés más fácilmente.
Contar en una entrada del blog todas las muestras de solidaridad que hemos recibido en el tiempo que llevamos funcionando va a ser difícil, así que reflejaremos algunas anécdotas sucedidas en los últimos meses y en las que, aunque no estén los nombres de todas las personas que nos están ayudando a «sacar esto adelante», sí creemos que puede verse recogido todo ese torrente de solidaridad que hemos recibido.
Para empezar os presentamos a este grupo: Auxi, Vanesa, Fran y Juanjo son las compañeras de «apoyo social», tienen el encargo de acompañarnos y ayudarnos en las necesidades que nos van surgiendo: desde problemas de salud a la formación. Le dedican mucho tiempo a ello y lo hacen muy bien, pero además lo hacen de forma voluntaria. Igual que voluntariamente trabaja el «grupo de contraste», un grupo de expertos en diversas materias (administración, gestión de residuos, derecho…) que últimamente tenemos muy abandonado como grupo pero que individualmente sigue respondiendo a nuestras muchas consultas de ignorantes.
También hemos recibido el cariño y el apoyo de nuestras amigas y amigos de Traperos de Emaús de Murcia y de Navarra. Ya os hemos contado aquí alguna de las historias que hemos compartido con unos y otras pero no que, desde antes de empezar, nos acogieron, nos acompañaron, nos aconsejaron, nos mimaron… Igual que nos sentimos arropados en REAS, desde la que entidades como Encuentros del Sur o personas como Toni Pons han estado muy cerquita todo el tiempo. O de Jaime, que editó este vídeo en la primera campaña que hicimos para recabar los fondos que necesitamos para poner en marcha el proyecto:
Hay gente como Dimas, Mª Angeles, Sergio, Paloma, Elena, Fernando, Tere… que nos conocían y nos querían antes de empezar a andar y que nos prestaron generosas cantidades de dinero con algo más importante, la confianza en que la viabilidad del proyecto haría que se lo podríamos devolver. O como Jesus Mª, que no nos conocía de nada y que hizo lo mismo. O Montse que hizo el primer ingreso en nuestra cuenta
O Rocío y Jose Mª, ingenieros que han colaborado muy generosamente con Traperos Huelva. O Jesús que nos ha hecho la instalación eléctrica de la trapería. O Susana y Raúl, nuestros técnicos de referencia del CADE, que tanto nos está apoyando. O Eladia y el resto del equipo de la Escuela de Economía Social (focalizamos, contabilizamos analíticamente…). O Julio que no sólo nos dejó en herencia el coche, también el encargo de sacar esto adelante. Era alguien de la familia. Y eso, nuestras familias, que han aportado su paciencia, su apoyo y la capacidad de adaptarse a las estrecheces que estamos pasando en estas primeras etapas del proyecto.
O todos los que han confiado en nuestro trabajo. En nuestra base de datos tenemos registrado 286 clientes. Mucha gente que ha llamado y confiado en nosotras y nosotros.